Las ventajas y desventajas de las etiquetas RFID implantables

La identificación por radiofrecuencia es una tecnología que codifica datos en microchips etiquetados en objetos, de modo que los datos se pueden recuperar en cualquier momento a través de ondas de radio. RFID se ha convertido en una tecnología común en las cadenas de suministro y la logística, lo que permite un seguimiento de inventario rápido y preciso y características de seguridad mejoradas. La miniaturización de la tecnología RFID también ha llevado al desarrollo de etiquetas lo suficientemente pequeñas como para implantarse en personas y animales.

Identificación permanente

Una de las principales ventajas de las etiquetas RFID implantables es que tienen una forma de identificación permanente. La información codificada en una etiqueta RFID subdérmica nunca se puede perder ni robar, y solo puede recuperar esos datos con un escaneo de corto alcance del área donde reside el implante. Este tipo de tecnología puede ayudar en la identificación de personas desaparecidas, así como en la prevención de confusiones en hospitales y otras áreas donde la identificación errónea podría conducir a complicaciones importantes.

Preocupaciones sobre la privacidad

El crecimiento de RFID ha generado algunas preocupaciones sobre los posibles problemas de privacidad de la tecnología. Por lo general, los chips RFID más pequeños contienen un número de identificación único para usar con una base de datos correspondiente, pero un escáner de terceros podría recoger ese número y permitir que otra persona lo use con fines de seguimiento. Un pulso de escaneo de RF lo suficientemente potente podría leer la etiqueta desde una distancia corta, posiblemente permitiendo que alguien lo escanee sin su conocimiento; sin embargo, sin la base de datos correspondiente, no podrían buscar ninguna información personal codificada en el sistema, pero aún podrían usar ese identificador único para monitorear sus movimientos.

Problemas de salud

Al igual que con cualquier objeto extraño que ingrese al cuerpo, las etiquetas RFID implantables podrían presentar riesgos para la salud. Estos chips son extremadamente pequeños para minimizar el trauma, pero los sitios de inyección aún pueden infectarse y los chips también pueden llegar a la superficie de la piel con el tiempo. Además, un pulso RFID lo suficientemente potente podría dañar el chip y posiblemente causar irritación o traumatismo en el tejido circundante.

Microchip para mascotas

Si bien los chips RFID implantables no se han afianzado con fuerza en las aplicaciones humanas, un área en la que han demostrado su utilidad es la identificación de mascotas. Colocar un microchip en una mascota implica la implantación de una pequeña etiqueta RFID, que permite a los veterinarios escanear e identificar a los animales que han perdido sus etiquetas de identificación. Las mascotas con microchip tienen muchas más posibilidades de regresar con sus dueños si se pierden, y las etiquetas pueden proporcionar a los veterinarios o manipuladores información sobre las necesidades especiales de un animal, como alergias o medicamentos necesarios.