El uso personal de teléfonos móviles en el lugar de trabajo puede reducir la productividad de los empleados y, a menudo, distrae a otras personas en la oficina. La mejor manera de evitar que los empleados usen sus teléfonos celulares en el trabajo es instituir y hacer cumplir una política de uso de teléfonos celulares que proporcione pautas y consecuencias que se detallen claramente.
Paso 1
Redacte una política de uso de teléfonos celulares que describa claramente las expectativas y las consecuencias. Considere problemas como la distracción y el nivel de ruido para ayudar a establecer pautas de política. Limite el uso del teléfono celular solo a los descansos, requiera tonos de timbre silenciosos y configuraciones de vibración, o prohíba el uso de juegos. Aborde el uso de la cámara incorporada, que puede plantear problemas graves relacionados con la seguridad de la empresa y la privacidad de los empleados. Consulte a sus gerentes y al equipo de TI para garantizar una política práctica y ejecutable. Busque la aprobación final de su equipo legal, si tiene uno, especialmente si se encuentra en una industria regulada, como la atención médica o las finanzas.
Paso 2
Establezca disposiciones para llamadas relacionadas con emergencias. Permita una cantidad razonable de uso del teléfono celular según el caso. Un empleado con un dependiente enfermo puede requerir llamadas personales con más frecuencia durante tiempos de crisis de salud. Exija a los empleados que compartan sus necesidades, pero no viole la privacidad personal. Indíqueles que le notifiquen antes o después de recibir una llamada de emergencia para evitar una acción disciplinaria.
Paso 3
Exija a los empleados que lean y firmen la política de uso de teléfonos celulares y guarden una copia de su reconocimiento en su archivo de empleados. Explique claramente las consecuencias formales de cada violación de la política. Emitir un número determinado de advertencias verbales y escritas, que si se ignoran conducirán a la suspensión o terminación.
Paso 4
Dé un buen ejemplo a sus empleados al adherirse a las pautas de las políticas en todo momento. Espere lo mismo de los gerentes. Haga cumplir estrictamente la política haciendo cumplir las consecuencias por cada nueva infracción.
Actualice la política anualmente para adaptarse a los cambios recientes en la estructura de la empresa y los avances tecnológicos. Lleve a cabo sesiones de capacitación periódicas para reforzar el comportamiento apropiado según la política.