Los teléfonos móviles se han vuelto casi omnipresentes en la vida diaria. Un estudio de Pew Internet en 2011 mostró que el 85 por ciento de los estadounidenses adultos poseen un teléfono celular, y para 2012, casi la mitad de ellos eran teléfonos inteligentes. La difusión de estos dispositivos de comunicación ha afectado la vida moderna de muchas formas y ha mejorado enormemente la conectividad personal en el trabajo y el juego.
Contactos de emergencia
Una de las ventajas más valiosas de tener un teléfono celular es su utilidad en caso de emergencia. Si tiene un accidente de tráfico o una situación médica fuera de casa, un teléfono celular le permite pedir ayuda rápidamente. La extensión de las torres de telefonía celular significa que puede encontrar señales incluso en áreas remotas, y el uso de receptores GPS y otras tecnologías de ubicación en teléfonos celulares significa que el personal de rescate puede localizar rápidamente su señal y brindar ayuda desde los recursos más cercanos. Incluso los teléfonos celulares bloqueados sin servicio de pago permitirán al usuario marcar el 911 en caso de emergencia, lo que convierte al teléfono celular en una herramienta de seguridad invaluable.
Siempre conectado
El crecimiento de los teléfonos móviles entre los adultos también ha dado lugar a una cultura de "siempre conectados". Sin un teléfono celular, se desconecta de la red y se vuelve inaccesible cuando sale de su casa u oficina. Sin embargo, con un teléfono celular en su persona, está disponible las 24 horas del día, los siete días de la semana. Esta conectividad puede ser valiosa, pero también puede tener inconvenientes. Un estudio de 2005 de Noelle Chesley de la Universidad de Wisconsin-Milwaukee mostró que el uso de teléfonos celulares por parte de los empleados fuera del horario laboral ayuda a difuminar los límites laborales y familiares y puede aumentar los niveles generales de estrés. El uso excesivo de teléfonos celulares en lugares públicos también ha llevado a algunas empresas, como bancos y restaurantes, a instituir políticas que piden formalmente a los clientes que no utilicen sus teléfonos celulares cuando intentan realizar otras transacciones.
Computación portátil
Los teléfonos celulares han evolucionado desde simples dispositivos telefónicos hasta computadoras de bolsillo con muchas características adicionales. Los teléfonos inteligentes pueden tomar fotografías, grabar videos, reproducir música y permitirle navegar por la Web. La informática móvil se ha generalizado tanto que muchos sitios web mantienen una versión separada mejorada para dispositivos móviles de su contenido para atender a los usuarios con pantallas más pequeñas y conexiones de datos más lentas. Los teléfonos inteligentes más avanzados pueden permitirle realizar casi cualquier tarea comercial que pueda realizar mientras está sentado en su PC de escritorio.
Disminución de la línea terrestre
A medida que los teléfonos celulares se han vuelto más comunes y confiables, los estadounidenses confían con mayor frecuencia en ellos para su servicio telefónico residencial. Un estudio realizado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades en 2011 mostró que más del 31 por ciento de los hogares estadounidenses dependen solo de los teléfonos inalámbricos y han cancelado su servicio telefónico de línea fija. Más del 16 por ciento de los hogares también informaron que a pesar de mantener una línea fija, la mayoría o todas sus llamadas se realizaron a través de su teléfono celular.