Efectos físicos y sociales del uso de Internet en niños

Entre sus informes de 2005 y 2010 sobre el uso de los medios en la infancia, la Kaiser Family Foundation registró un aumento de casi el 17 por ciento en el tiempo dedicado al uso de los medios por parte de los niños estadounidenses de entre 8 y 18 años, impulsado principalmente por una rápida proliferación de dispositivos móviles. Este creciente consumo de medios por parte de los jóvenes ha llevado a padres, sociólogos e incluso funcionarios gubernamentales a cuestionar los efectos físicos y sociales de estas actividades, que ahora están desplazando actividades más tradicionalmente asociadas con la infancia. El uso de Internet en particular, una parte importante de cómo los niños acceden a los medios de comunicación, presenta una serie de preocupaciones para el bienestar de los jóvenes de hoy en un nuevo panorama de medios.

Riesgos físicos

Un informe publicado por la firma de investigación británica ChildWise encontró que los niños del Reino Unido pasaban casi una hora y 50 minutos en línea todos los días, además de dos horas y 40 minutos frente al televisor. Estas cifras, comparables a los hallazgos de la Kaiser Family Foundation en EE. UU., Revelan que los niños pasan un porcentaje grande y creciente de su tiempo libre dedicado a actividades sedentarias como el uso de Internet. Estas actividades sedentarias pueden provocar obesidad y un desarrollo muscular inadecuado en la primera infancia, mientras que el uso excesivo de la computadora también se asocia con trastornos de estrés repetitivo como el síndrome del túnel carpiano.

Riesgos sociales

Si bien la mayoría de las investigaciones muestran que el uso moderado de Internet y los juegos son benignos, un uso muy elevado que reemplaza las interacciones sociales de la infancia puede provocar un aumento de la soledad y la depresión. Ver contenido violento o sexualmente explícito de forma regular también puede contribuir a aumentar la agresividad, la indiferencia hacia el sufrimiento y la intimidad o la incapacidad de diferenciar la vida real de la simulación. La paradoja es que gran parte del tiempo que los jóvenes pasan en línea se dedica a "socializar" en las redes sociales y programas de chat, pero la falta de retroalimentación física en los medios en línea puede no servir para desarrollar habilidades sociales, límites e inteligencia emocional.

Riesgos cognitivos

El tiempo que se pasa en Internet puede ser una distracción de las actividades educativas para los niños, mientras que la disponibilidad de sitios web diseñados para hacer trampa y plagio también puede interferir con los objetivos académicos. Sin embargo, en un nivel más básico, el gran volumen de información disponible en Internet podría interferir con el desarrollo cognitivo infantil, especialmente porque muy poca de esa información es moderada y es posible que los niños muy pequeños aún no puedan evaluar la credibilidad de las fuentes. Un exceso de información, especialmente información contradictoria, está frecuentemente relacionado con condiciones psicológicas como el estrés y la fatiga.

Efectos positivos

Aunque los riesgos son considerables y es evidente que se necesitan más estudios, los peligros del uso de Internet entre los niños no deberían eclipsar por completo los posibles beneficios. Particularmente cuando la tecnología de Internet se usa con moderación y responsabilidad, la Web brinda a los niños acceso a una enorme colección de recursos académicos, puede contribuir al desarrollo de la motricidad fina y la coordinación mano-ojo a través de la manipulación de la computadora, e incluso puede servir para desarrollar la concentración y Habilidades de pensamiento crítico a medida que los niños aprenden a discriminar y filtrar información. Siempre que no reemplacen las interacciones sociales físicas, las aplicaciones sociales en línea también pueden complementar una vida social saludable.