RFID, o identificación por radiofrecuencia, es un método para almacenar datos y recuperarlos a través de ondas de radio. De la misma manera que un código de barras puede almacenar información sobre un tipo de producto, las etiquetas RFID contienen identificadores únicos que corresponden a los registros de la base de datos de inventario. Cambiar a RFID en su cadena logística ofrece algunas ventajas significativas sobre los métodos tradicionales de control de inventario.
Escaneo inalámbrico
Una de las principales ventajas de la RFID en la logística es la rapidez con que las etiquetas RFID pueden proporcionar información en comparación con los códigos de barras u otros sistemas. Con un código de barras, debe pasar cada código por un escáner para registrar el artículo. RFID funciona de forma inalámbrica, por lo que puede apuntar un escáner a una caja de artículos y registrar cada uno sin tener que sacarlos primero. Un escáner RFID lo suficientemente potente podría inventariar habitaciones enteras a la vez, haciendo que el seguimiento del inventario sea un proceso mucho más rápido.
Seguimiento único
Las etiquetas RFID contienen un microchip u otro dispositivo de almacenamiento que puede contener una gran cantidad de información. Esto le permite colocar identificadores individuales en los productos, en lugar de usar un solo código de barras para una clase completa de artículos, y seguir los artículos individuales a través de su cadena logística, en lugar de tener que extrapolar esos datos de los números de inventario. Esto también le permite rastrear un artículo defectuoso hasta su origen de una manera mucho más fácil que con otros métodos de rastreo.
Actualizaciones en tiempo real
Debido a que el escaneo y el control de inventario son mucho más rápidos con RFID que con otras formas de administración, el sistema se presta a la integración con sistemas de comunicación inalámbrica y sistemas de administración de inventario en tiempo real. Esto le permite consultar la base de datos en cualquier momento y averiguar exactamente qué cantidad de un producto determinado tiene a mano, en lugar de obtener números que pueden tener días o semanas de antigüedad. Los escáneres RFID integrados en las entradas de los almacenes pueden incluso escanear las cajas a medida que entran y salen, proporcionando actualizaciones instantáneas de los totales de inventario que pueden propagarse a otros usuarios a través de la red de la empresa.
Integración con otros sistemas
Las mismas etiquetas RFID que proporcionan información de inventario también pueden proporcionar otros servicios. Los escáneres de seguridad en las salidas de los edificios pueden permitirle a su sistema saber instantáneamente cuándo un producto sale de las instalaciones, lo que le permite detectar el robo o los envíos mal dirigidos rápidamente y corregir el problema. Del mismo modo, el escaneo de etiquetas RFID en los puntos de entrada y salida permite la confirmación del envío y la entrega de mercancías, lo que le permite rastrear un envío a medida que avanza a través de su cadena logística y proporcionar estimaciones precisas de la llegada a los clientes u otras unidades comerciales.